Author: Ochun

El paro agrario y el pulso territorial

Por: Alejandro Mantilla Q.

Delitos y debates

Jorge Eliecer Gaitán contrastó al país político con el país nacional. Diego Montaña Cuellar hizo la contraposición entre país formal y país real, y Darío Echandía habló de un orangután con sacoleva para describir a la democracia colombiana. Al hablar de Colombia ha sido recurrente el juego de las contraposiciones y las metáforas que reúnen extremos. En las últimas semanas los contrastes vuelven a flote. Mientras en la campaña presidencial los debates fueron reemplazados por las acusaciones mutuas de comisión de delitos, el movimiento campesino, indígena y afro abrió un debate programático sobre la política agraria y el futuro del campo.

La ciudad Colombiana: modelo por armar

Carlos Torres, aborda un diagnóstico actualizado de las ciudades colombianas, sus contrastes y contradicciones, para abordar al final un esbozo de agenda y programa desde los movimientos sociales. Artículo publicado originalmente en Le Monde...

Santiago de Cali: Entre las promesas del desarrollo neoliberal y la realidad del profundo conflicto social

Por: Anita Erazo

Tomado de: http://derechoalaciudadflacso.wordpress.com

Santiago de Cali, Colombia, cuenta con aproximadamente 2.319.655 habitantes (DANE, 2005) y es la ciudad más importante de la región del suroccidente, ya que se encuentra estratégicamente ubicada en el Pacífico colombiano, conurbana al puerto de Buenaventura, colindante con Cauca y próxima a Nariño (región rica territorialmente por el macizo colombiano y la salida al mar). Esto la convierte en referencia urbana para el entorno poblacional de la zona, introduciendo el imaginario de que es un espacio de múltiples oportunidades.

Villavicencio: Mandato por el territorio y el derecho a la ciudad.

Hay un resurgir de los procesos urbanos los cuales buscan rutas de reconstrucción de un movimiento urbano popular que logre conquistar el derecho a la ciudad. organizaciones de la ciudad de Villavicencio han emprendido ese camino. Este mandato da cuenta de ese esfuerzo de todo el año 2013.

Salario ínfimo y precarización

Por: Alfredo Burbano – Alejandra Porras

El 24 de diciembre de 2013, con la llegada del niño Dios, vino también un nuevo regalo de las clases empresariales y el gobierno a los trabajadores colombianos: la fijación del salario mínimo. Solo que este regalo parece resultado de una confabulación entre Heródes y Poncio Pilatos para amargar el año nuevo no solo de la clase laboriosa sino de toda la sociedad colombiana.