Renta Básica Universal: Pasar del asistencialismo a un enfoque de derechos
Desde que comenzó la pandemia y se tomaron las primeras medidas por el gobierno de Iván Duque en Colombia, varias organizaciones han propuesto que se asigne una Renta Básica Universal. Posteriormente varios senadores de la bancada de oposición radicaron un proyecto de ley en este mismo sentido. Hoy la propuesta se agita desde plataformas de DDHH, organizaciones sociales y políticas y desde algunos sectores de la academia.
Para conocer un poco más sobre esta iniciativa CEDINS entrevistó a Edgar Mojica Vanegas, Dirigente político del Congreso de los Pueblos y Secretario General de la CUT, una de las organizaciones más activas en impulsar la propuesta.
CEDINS: ¿De dónde surge la propuesta de Renta Básica Universal (RBU) y en qué consiste?
EDGAR: La propuesta es una construcción a muchas manos a nivel mundial. Busca que exista un ingreso económico permanente, para todos los ciudadanos, sin discriminación, que les garantice condiciones básicas de vida digna.
En el país se trabaja con ese enfoque y desde el comienzo de la pandemia, en respuesta a las primeras medidas del gobierno, la CUT sacó la propuesta de Renta Básica, enviando comunicación a Duque con esa exigencia.
La propuesta, obedeciendo a las circunstancias actuales de la pandemia, se orienta a que se atienda a la población más golpeada y vulnerable. Esto es que la RBU les llegue especialmente a desempleados/as y trabajadores/as informales.
CEDINS: ¿De cuántas personas estamos hablando?
EDGAR: Desde la CUT nos movemos con una población de 14 millones de personas en la informalidad. De éstas, el 50%, es decir más o menos 7 millones, son personas que apenas subsisten con lo que consiguen día a día. Por otra parte, en el país hay aproximadamente 3 millones de personas desempleadas, aunque esta cifra va creciendo. En síntesis, en una primera medida para garantizar un ingreso básico como derecho, a través de la RBU, estamos hablando de que debe llegar a 10 millones de personas.
El proyecto del grupo de senadores tiene una cobertura más amplia ya que incluye a emprendedores y microempresarios, pero el enfoque es el mismo.
CEDINS: ¿De dónde saldrían los recursos para estas asignaciones?
EDGAR: Asignar esta RBU a los 10 millones de personas costaría alrededor del 0,9% del PIB, que en pesos son unos 10 billones. Proponemos que se financie desde varias fuentes:
Uno primero, y teniendo como prioridad la vida de las personas, se debe echar mano de una parte de las reservas internacionales.
Otra fuente es recuperar el dinero que se va en pago de deuda, a través de amortización y renegociación o no pago de interés. Si se hiciera esto se el país estaría recuperando alrededor de 21 billones de pesos.
Otros recursos se pueden obtener poniendo impuestos al gran capital, que se ha apropiado de recursos públicos mediante las exenciones tributarias por más de 10 billones de pesos, hay que recuperar también ese dinero que es de los colombianos y colombianas.
Finalmente, se puede emitir dinero, con este fin concreto de asignar la RBU.
CEDINS: ¿Cuáles son las diferencias entre la propuesta de RBU y los planes y asignaciones que ya hace el gobierno?
EDGAR: Lo fundamental es que la propuesta de RBU apunta a exigir un derecho fundamental: tener un ingreso que permita vivir. Por su parte los planes del gobierno son focalizados, limitados y asistencialistas.
Los distintos subsidios y bonos gubernamentales llegan apenas a 3 millones de personas y algunos montos no superan los $160.000. Nosotros proponemos que el piso sea un salario mínimo.
CEDINS: Finalmente, ¿cómo evitar que estos recursos se vayan por el agujero de la corrupción?
EDGAR: La corrupción es un riesgo para toda propuesta. El país tiene el reto de superarla. Reto difícil con un gobierno que precisamente fue electo de forma corrupta, con compra de votos y fraude.
La lucha por la RBU debe contener propuestas de procedimientos, seguimiento y control, para que las asignaciones lleguen donde deben llegar. Esperamos que las organizaciones y la ciudadanía haga propuestas al respecto y se apropie de la veeduría necesaria.