Retos del II Encuentro Nacional de Procesos Urbanos del Congreso de los Pueblos

Por: Elizabeth Martínez – CEDINS

El Segundo Encuentro de Procesos Urbanos del Congreso de los Pueblos que se realizará los días 2 y 3 de Noviembre en la ciudad de Bucaramanga es resultado de la reflexión en torno al método de trabajo popular en las ciudades, que inicia con  la realización del Congreso de Tierras Territorios y Soberanías y que hoy en día  nos lleva a pensarnos un espacio de encuentro que vaya más allá de reconocer el desarrollo de nuestras experiencias, evidenciando la necesidad de construcción de una propuesta de ciudad, dinamizada e impulsada por un movimiento popular urbano.

Partiendo de esta premisa el objetivo del II Encuentro es propiciar un espacio de convergencia y construcción colectiva de visiones y acciones entre los procesos sociales, en el que podamos compartir las caracterizaciones del modelo de ciudad impuesto por el capital, y las alternativas  que visionamos desde el campo popular.

Este objetivo a simple vista pone de manifiesto la necesidad  de crear espacios de reflexión de ciudad más allá de la caracterización del modelo; caracterización que aunque sigue siendo aún débil, no puede dar espera a que se constituyan escenarios de proyección del papel de los procesos urbanos del Congreso de los Pueblos en la consolidación de un movimiento popular urbano. Uno de los análisis resultantes del reciente Paro Nacional Agrario es que la participación de los procesos urbanos pudo ser más protagónica de haber existido una plataforma de lucha propia, que recoja en contexto los innumerables problemas que aquejan a la población de las ciudades colombianas.

En este sentido el encuentro no puede entenderse solo como un evento que nos permita acercarnos como procesos para reflexionar sobre nuestras experiencias de trabajo, ya que éste es fundamental para entender cuál es la ruta a seguir para la construcción de la propuesta de ciudad que va a ser impulsada por un movimiento Popular urbano. Estos retos exigen lecturas  concretas como organizaciones y procesos urbanos.

• La primer claridad que debemos tener es que el II Encuentro no es un espacio para acercarnos, principalmente, a las posibles y variadas visiones de ciudad, puesto que sobre estas ya hemos reflexionado, debiendo pasar ahora a desarrollar las distintas posturas y planteamientos que tenemos sobre la ciudad en Colombia y la disputa del poder en ella.

• Tampoco podemos pretender que este sea un momento para conocer, las problemáticas  y conflictos de cada ciudad, pues este no tiene la intensión de realizar diagnósticos: estos ya se han trabajado y producto de estos se elaboró el mandato urbano de Congreso de Tierras; sin embargo este si es un momento para entender cual es la relación de estas problemáticas y  conflictos urbanos a nivel nacional e incluso latinoamericano.

• La socialización de experiencias de trabajo como procesos urbanos es un elemento que nos ha permitido entender cuáles son las distintas apuestas en la ciudad desde cada uno de nuestros procesos y como podemos generar una articulación real de estas en proyección hacia la construcción de un método de trabajo popular que de cuenta de las nuevas contradicciones y dinámicas que se expresan en la ciudad.

• Es fundamental reconocer que en este momento no partimos de cero, es claro que varios de los acumulados del trabajo están en el Congreso de Tierras y el Congreso de paz, pero estos no son los únicos, ya que estos no son ni el comienzo ni el fin del trabajo de Congreso de los Pueblos en materia de ciudad. No podemos olvidar el trasegar histórico que como sujeto político hemos tenido en la consolidación o estad actual del Movimiento Popular Urbano, pues esta es de la única manera que podemos entender, cuales son los aciertos y desaciertos, que hemos tenido y como de esta manera reconocemos nuestros avances en el trabajo.

• Para la consolidación de un MPU a nivel nacional, es necesario elaborar una ruta de acción común que nos permita hacer con otros más allá del Congreso de los Pueblos y las agendas de acción y lucha deben pensarse ese actuar con otros en dos niveles: nacional e internacional, ya que es importante que tengamos claro que no somos los únicos que en este momento sienten la necesidad de fortalecerse como actor político en las ciudades.

• Por ultimo, el Encuentro es una posibilidad de poner a jugar nuestras apuestas en la construcción de una ruta de acción común para las ciudad como CDP; y para esto es necesario reconocer nuestras diferencias y dificultades, pero también es importante entender que si bien este es un momento que nos permite despegar como sector con propuestas y acciones propias, esto solo es posible en la medida en que empecemos un trabajo continuo de coordinación y articulación conjunta libre de  fragmentaciones como organización o proceso, donde el mismo Encuentro es resultado de este ejercicio. La disputa es por el poder en las ciudades, donde el poder popular se confronta con el poder del capital y no una disputa entre procesos populares.

Por estas razones el II Encuentro Nacional de Procesos Urbanos- Congreso de los Pueblos, es un espacio que nos va a permitir poner a jugar nuestras posturas y planteamientos, sobre la ciudad que tenemos en relación con la ciudad que queremos; y  que podemos y debemos hacer para lograr esa ciudad que queremos.